Es posible encontrar esa actividad que nos permita hacer lo que nos gusta sin descuidar lo que más queremos.
Ser mamá nos cambia la vida en muchos aspectos, nos dirige a otros rumbos y a veces por más que queramos forzar algo, eso en específico no sucede del todo.
Hay mujeres que no logran conciliar la maternidad y el trabajo por lo que se vuelve una guerra de dos mundos. Y así pasa el tiempo, sufriendo entre el querer volver a casa y quedarse con los niños o también estamos aquellas que nos quedamos con el deseo de salir a trabajar o ganar algo extra.
A mí me gusta aprender, sobretodo cosas nuevas y cuando llega el momento sacar a flote ese aprendizaje. En mi caso me especialicé en terapias alternativas antes de que naciera el más pequeño y fue él quien me llevó a profundizar después en mis estudios sobre maternidad, lactancia, parto y crianza respetada.
Ya cuando estábamos estudiando en casa me decidí por seguir preparándome sobre el tema de educación. Pero no puedo salir de casa o seguir horarios que no van de acuerdo con mi estilo de vida.
Es normal que sientas que tu vida necesita un nuevo rumbo o que estas atorada en la misma rutina del día a día y no sabes cómo modificarla.
¿Has pensando en volver a estudiar? Te emocionaría retomar o especializarte en algo que quizá no sea aquello sobre lo que te preparaste para el futuro. Más bien algo que se acomode a tu estilo de vida y gustos en la actualidad.
Es más fácil de lo que piensas, no es necesario volver a la escuela propiamente. Puedes aprender muchas cosas nuevas desde casa, incluso hacer de ellas una actividad económica.
¿Qué te gusta hacer? ¿Hay alguna actividad que disfrutas mucho o eres buena y sabes que podrías sacarle más provecho?
Por ejemplo si eres buena cocinando, podrías estudiar algo relacionad en línea o fuera de casa mientras tus niños van a la escuela o en días que alguien te ayude a cuidarlos. Muchas veces en esos cursos permiten llevar bebés pequeños. Y después preparar comidas para eventos, para las personas que no pueden cocinar en su casa y ocupan comidas caseras y saludables congeladas.
No todo es cocinar y hay muchas cosas que aprender en distintas plataformas en línea, algunas de ellas además son gratuitas. Hay desde fotografía, manejo de redes sociales, expertos en temas de maternidad o tecnologías.
Todo es que te enfoques y decidas que te gustaría aprender para mejorar tus aptitudes actualmente. En la universidad de mi ciudad hay clases de idiomas y otro tipo de aprendizajes que no requieren una asistencia de más de dos horas al día.
Cuando mi hija mayor tenía año y medio de edad aprendí a pintar las caritas de los niños en las fiestas. Me iba con ella a eventos infantiles o fiestas de familia y amigos con mis tarjetas y volantes con promociones y tenía clientes que me contrataban más adelante. Mi hija se divertía mientras yo trabajaba y además la mayoría de las veces salía con bolsita de dulces o premios en la mano.
Conciliar es posible. Solo es cuestión de adaptarse, tener la capacidad de aceptar el rumbo de nuestra vida y buscar opciones diferentes para poder elegir aquella que nos saque de la depresión, de dificultades económicas o nos permita simplemente hacer lo que nos gusta sin descuidar lo que más queremos.